Si Guido sigue siendo un músico misterioso, es por falta de archivos. Nacido hacia 1675, fue
destaca entre los alumnos de violín del Conservatorio della Pietà dei Turchini de Nápoles, y luego entre los músicos de la Chapelle Royale hasta 1702.
Si Guido sigue siendo un músico misterioso, se debe a la falta de archivos. Nacido hacia 1675, figura entre los alumnos de violín del Conservatorio della Pietà dei Turchini de Nápoles, y luego entre los músicos de la Chapelle Royale hasta 1702. Fue entonces cuando marchó a París y entró al servicio del duque Philippe d'Orléans, futuro Regente de Francia y gran melómano, donde se convirtió en Maestro de Música. Se codeó así con Morin, Gervais y Forqueray, y contribuyó a dar a conocer la música italiana en Francia. También entró en el círculo del financiero Pierre Crozat, donde dio conciertos entre 1714 y 1726, trabajando junto a personajes como Watteau y el banquero Law.
Entre 1713 y 1716, Crozat redecoró su comedor y encargó a Watteau cuatro cuadros sobre el tema de las estaciones. Sin duda para rendir homenaje a este admirable nuevo conjunto, Guido compuso hacia 1717 sus Scherzi armonici sopra le quattro stagioni dell'anno, basados en cuatro poemas anónimos: Les Caractères des Saisons. Cada uno de estos «entretenimientos musicales» consta de una decena de movimientos y, aunque se denomina concierto, también se asemeja a una suite francesa: la música es una hábil mezcla de estilos italiano y francés.
Las Estaciones de Guido se publicaron en Versalles sin fecha, pero es razonable suponer que fueron escritas entre 1725 y 1733: son contemporáneas de las famosas Estaciones de Vivaldi, y quizá un poco anteriores. ¿Quién inspiró a quién?